Los microorganismos del género Mycoplasma son agentes patógenos, colonizadores ubicuos, procariotas más pequeños y de vida independiente conocida, aunque debido a sus requerimientos de crecimiento son de difícil cultivo. Estos microorganismos del género Mycoplasma carecen de pared celular y están rodeados por una membrana que contiene esteroles. Gracias al tamaño y a la capacidad de su membrana deformable pasan a través de filtros cuyos poros pueden retener bacterias visibles al microscopio (MANDELL et al, 2006).