La implementación del motu proprio Mitis Iudex Dominus Iesus en las diócesis, ha provocado varios retos para los Obispos. Uno de ellos es la constitución de su propio tribunal eclesiástico donde no lo hubiera y la de seleccionar el personal idóneo para la delicada labor judicial. El presente trabajo se centra en el cargo del juez en el proceso especial para las causas de declaración de nulidad matrimonial en primera instancia. El autor describe la función del juez en un recorrido histórico desde el abrogado Código de 1917 hasta la entrada en vigor del citado motu proprio. Analiza los aspectos que debe considerar el juez para emitir su voto antes de la sesión de fallo en las causas de declaración de nulidad. Finalmente, el autor propone la integración de los principios, criterios y novedades establecidos por la reforma en la actuación del juez, a través de aspectos prácticos que contribuyan a la administración de la justicia desde una perspectiva más cercana a los fieles.