Descrição
La implementación del Sistema Penal Acusatorio en nuestro ordenamiento, ha traído grandes cambios en la forma de administrar justicia en el ámbito del Derecho Penal. Prueba de este gran viraje, es la transformación sufrida por los mecanismos para garantizar el acceso a la administración de justicia, específicamente, en cuanto a la calidad y efectividad de los abogados encargados de la defensa. En este artículo se busca ilustrar la forma en que este nuevo sistema ha modificado radicalmente viejos paradigmas frente a este respecto, con un modelo de defensoría pública mucho más fortalecida y capacitada para enfrentar los nuevos retos de este régimen, pero con una nueva brecha entre los defensores de confianza para ciudadanos que cuentan con recursos y los que carecen de ellos, evidenciándose una amplia ventaja de los primeros frente a estos últimos, dada la carencia de medios para lograr la capacitación requerida.