Descripción
Dice Solá Morales, que la razón y la fuerza de la ciudad residen en la intersección de personas, construcciones, movimientos y energías. De esta afirmación se puede deducir que las esquinas tienen tres (3) componentes de oportunidad esenciales, morfológico (1), cultural (2), y económico (3). El conjunto complejo de estos tres elementos forma el concepto de paisaje. Bogotá en sus áreas de centralidad presenta intersecciones y esquinas con gran potencial para generar un proyecto arquitectónico-urbano estratégico, y así explotar sus posibilidades morfológicas, culturales y económicas. Sin embargo, en varios de estos puntos fundamentales se encuentran establecimientos comerciales, de un impacto morfológico y cultural incompatible con las características propias de la esquina. El proyecto tomará lugar en una de las esquinas del cruce entre la calle 100 y carrera 11. Este tiene en cuenta principios morfológicos, como empates en altura con los vecinos, continuación de paramento, generación de espacio público en la esquina para explotar condiciones culturales, creación de una topografía de subsuelo y rasante para darle lugar a un equipamiento, una altura significativa y su respectivo remate que realce esta posición estratégica de esquina. Por otro lado se propone un zócalo de comercio y servicios en los primeros niveles, igualmente se concibe un mix funcional basado en la caracterización del sector y un estudio de mercado con el fin de conocer los usos requeridos allí.