La propuesta se da a partir de formas contrastantes con respecto al lugar por medio de 6 edificios conectados por debajo de la tierra entre si y el panóptico, logrando un lenguaje arquitectónico contemporáneo que incorpora y respeta el monumento actual del siglo XIX, influido por nuevas ideas y planteamientos de diseño de la arquitectura contemporánea, donde el edificio como tal se articula a todo un sistema de hitos y equipamientos por medio de pliegues que se entrecruzan a lo largo de 3 manzanas donde se eliminaron casi todas su edificaciones y 2 vías vehiculares. Esto para generar espacios integrados atreves del medio natural ya que uno de los fines principales de la propuesta es crear un museo con un espacio público habitado constantemente por personas y vida natural tratando de equilibrar el déficit cualitativo y cuantitativo ambiental de la ciudad de Bogotá.