Descrição
Actualmente el planeta está teniendo cambios en sus patrones climáticos y en todo el mundo se están presentando diversas reacciones ante estos cambios. De acuerdo con su latitud algunos países presentan variaciones climáticas marcadas, denominadas estaciones, mientras que otros debido a su cercanía con la línea del Ecuador, presentan variaciones en el régimen de lluvias. Sin embargo, todos están experimentando los efectos del cambio en el clima global y por lo tanto deben adaptarse, mitigar consecuencias y generar soluciones dependiendo del impacto que tengan estos cambios (Heck, Andre 2006). Colombia no tiene estaciones pero según el IDEAM, al estar localizada cerca al Ecuador, y dadas sus características físicas,-como la topografía irregular-, sociales-como el asentamiento de población en zonas de alto riesgo-, y su diversidad en microclimas, es más vulnerable a los cambios climáticos. Esto implica que para el país, es de vital importancia generar la capacidad de entender las consecuencias que denotan los cambios en el clima, evaluando amenazas y previendo los impactos sobre los territorios, ecosistemas y economías. Un muestra de la alta vulnerabilidad social, económica y ambiental de Colombia fue el balance de pérdidas cercanas a 11.2 billones de pesos, 3.2 millones de personas afectadas y un 82% de daños estimados en los sectores de vivienda e infraestructura, dejado por "El fenómeno de la Niña" 2010-2011 según el estudio de "Valoración de daños y pérdidas, Ola invernal en Colombia" (Comisión Económica para América Latina - CEPAL; Banco Interamericano de Desarrollo – BID, 2012). Las pérdidas económicas, humanas y ambientales que dejó el fenómeno, evidenciaron la ausencia de estrategias de adaptación como respuesta al cambio del clima y eventos climáticos extremos, lo que llevó a la creación del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático PNACC (Lozano, 2016). La finalidad del PNACC es reducir la vulnerabilidad del país e incrementar su capacidad de respuesta frente a las amenazas e impactos del cambio climático (PNACC, 2012).
Frente a esta situación el gobierno colombiano ha tomado acciones como la creación del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático (PNACC), de la Política Nacional del Cambio climático (PNCC) y del Plan Regional Integral de Cambio Climático (PRICC)
que dentro de sus diversos lineamientos, objetivos y actores, incluyen a la arquitectura como parte de la solución de la problemática. En términos generales Colombia presenta regiones con vulnerabilidad alta, por amenaza de aumento de precipitaciones, lo cual produce inundaciones; y de disminución de precipitaciones, lo cual genera sequías. Uno de estas regiones vulnerables es la Sabana de Bogotá, que a su vez presenta municipios con alta vulnerabilidad frente a las inundaciones. Según los informes del PRICC, uno de los municipios que más se encuentran en amenaza por inundaciones y afectación en la disponibilidad y calidad hídrica, es el Municipio de Chía; y por esta razón lo elijo como lugar de trabajo. Tras hacer un análisis a Chía, en relación a sus características físicas, espaciales, sociales, demográficas y ambientales, se entiende que Chía cuenta con dos cuerpos hídricos muy importantes, como lo son el rio Frio y el Rio Bogotá, sin embargo el municipio ha vivido con presión de desarrollo y crecimiento acelerado desde hace ya más de 50 años, la cual no previó respetar las rondas y comportamientos naturales de estos ríos, lo cual ha generado consecuencias(inundaciones) por urbanizar cerca de los cuerpos hídricos, no cuidarlos y negar valor que tienen para el territorio. De acuerdo con lo anterior, este trabajo de grado plantea estrategias que permitan a la arquitectura aportar a la solución de la problemática del cambio climático, especialmente a las inundaciones; y posteriormente aplicar estas estrategias en un proyecto piloto, mediante el diseño urbano de espacio público, para agrupaciones de vivienda. Estas estrategias son direccionadas bajo dos conceptos fundamentales, mitigación y adaptación; están determinadas el marco de las acciones globales y políticas frente al cambio climático y son traducidas a la arquitectura teniendo en cuenta las condiciones climáticas del territorio de trabajo. Un aspecto clave para el desarrollo de estas estrategias, es el uso de datos de proyecciones en el territorio, es decir trabajar en base a lo que se prevé científicamente para el futuro en el territorio y no en base a datos históricos, pues que lo que genera son errores al proyectar, ya que el territorio está en constante evolución. El proyecto piloto que materializa las estrategias en Chía, implementa el uso de nuevas tecnologías de energías renovables, para su implantación incluye estudios de soleamiento, y está proyectado para que se adapte a las consecuencias del cambio climático en diferentes escenarios temporales como lo son el 2025, 2070 y 2100.