Descripción
En las últimas décadas el consumo del yajé se ha popularizado entre un gran número de personas que viven en la ciudad. A través de la ingesta de esta planta, referida como sagrada por las sociedades indígenas del Amazonas, se buscan curaciones para dolencias del alma o del cuerpo y se llevan a cabo las denominadas exploraciones de las “espiritualidades”. Muchas de las personas que realizan estas prácticas no se identifican como indígenas y utilizan el imaginario que rodea a estos ritos para ganar poder y ejercerlo con fines económicos, políticos y personales.
En este libro se presenta una investigación a partir de la experiencia de su autora, quien vivió en la Comunidad de Paz Carare de Pensamiento Bonito por doce años, durante los cuales su existencia osciló entre la fraternidad, el dominio, la subordinación, la violencia y la esclavitud humana. A través del concepto de neochamanismo urbano, se aborda a esta organización instituida como fundación y como comunidad que se cimienta sobre una supuesta reapropiación de rituales de lo indígena, como tomas de yajé, mambe de coca y ambil, y que terminan convirtiéndose en ficciones e invenciones que sirven para justificar relaciones de poder autoritarias y violentas.