Descripción
"El ojo no ve cosas sino figuras de cosas que significan otras cosas.”
-Italo Calvino.
La producción de espacios instagrameables que son aprobados por el fenómeno mediático-social de la “selfie”, consecuencia de la revolución tecnológica y la industrialización acelerada, bajo modelos altamente contaminantes y capitalistas, han creado nuevos hábitos de consumo y ha hecho debatirse la condición del hombre en relación con su espacio/tiempo, del cómo habitamos estos nuevos espacios entendiendo la sociedad acelerada en la que nos encontramos enmarcados y cómo repercute en la arquitectura contemporánea y el dialogo que entabla de manera multidimensional.
El siguiente Trabajo de Grado empieza por problematizar desde una mirada critica de la “selfie” como un fenómeno naturalmente urbano que está alterando los modos de vivir y hacer la arquitectura y que ha sido resultado de un interés por indagar en la imagen de si mismo (self) para estetizar una consciencia de época, lo que convierte a la “selfie” en un artificie de un mundo de espacios con intenciones temporales, superficiales y mediáticas, que tienen como objetivo atraer a un publico con un deseo de consumir. De este modo la intención de este documento es que a partir de una reflexión académica, proponer un campo de estudio en el “self expandido”, aludiendo a la escena trasera de la imagen, producida en la interacción de un sujeto con una máquina capturándose a si mismo, permitiendo analizar las cualidades espaciales que se puedan encontrar en el contexto espacial de la mirada inconsciente del que retrata y es retratado (self).
Esta imagen, resultado de la selfie ya no es únicamente la búsqueda de la verdad y el deseo de retener el tiempo o conservar la memoria, se ha convertido en objeto de comunicación, expresión, y problematización, lo cual ha sido posible por la inclusión de los nuevos medios no solo tecnológicos sino también de difusión como Instagram o Facebook causando un efecto espacio/tiempo en cómo habitamos, lo que Paul Virilio llamaría “apartamiento” sobre menos distancia en el espacio que el de la distancia-tiempo, que afectan también en aspectos sensoriales y emotivos en los usuarios. Es por eso que tiene gran validez la investigación de la fotografía “selfie” (el resultado físico/ virtual de la imagen con el contenido del self) como narración de una sociedad que genera una serie de valores hacia el espacio, convirtiendo el mismo acto de la toma de la selfie en un juicio o valoración del espacio mismo.
Así que uno de mis intereses es generar vínculos entre distintas áreas de conocimiento tanto desde una Herramienta de Análisis Espacial desde el concepto de self expandido, implica un método mixto, con la convergencia de disciplinas como la filosofía, las artes visuales, la escenografía, la museografía, entre otras, que pueden aportarle una reflexión crítica y sensible, al modo de cómo se esta pensando y produciendo la arquitectura como herramienta de aprendizaje en arquitectos en formación, como también una reivindicación de quien diseña desde la conciencia de nuevos modelos tecnológicos y de relación; y la interpretación del self en la concepción de espacios dentro de un contexto educativo.
Como hipótesis se espera introducir la presencia del arquitecto bajo un lenguaje performativo y útil para la identificación de espacios “instagrameables” o de gran interés a nivel social capaces de ser captados en fotografías. Estos nos ayudará a conocer el desarrollo de nuevas tendencias e interpretaciones del self hacia la arquitectura, superando la concepción de self como elemento individual y abordando más el análisis a partir de la intersubjetividad. Reuniendo la experiencia del self como un punto de partida para concebir su potencial comunicativo desde una perspectiva cultural y como práctica social dentro un lenguaje de red. Con el interés de entender la incidencia de la lectura de la arquitectura por medio de imágenes.
Para emprender este recorrido, es necesario entender que la metodología de trabajo que se utilizó no fue de manera lineal, sino que fue un proceso que surgió de una indagación personal por una intuición asociada a la selfie, que toma elementos del sujeto (self). Así mismo fue necesario realizar un recuento histórico de las implicaciones que ha tenido el considerar autorretratarse y las herramientas y tecnologías que han hecho posible materializar la participación del individuo en panoramas existentes arquitectónicos, pero por una elección inconsciente, y así poder llegar al problema que se plantea a través de toda la investigación.
Es por ello, que se va a exponer a lo largo del trabajo el efecto reciproco que se encuentra dentro del interaccionismo del cuerpo, el espacio y la máquina, lo cual en este trabajo se denomina performance o método performativo. De esta manera se pretende evidenciar los modos de producción de la subjetividad del espacio que no se revelan de manera tan evidente. Con ayuda del concepto de self expandido será posible la construcción de unas nuevas topologías sensibles de paisaje a partir de un mapeo performativo.
La selfie por su naturaleza de inmediatez y universalidad, y su carácter de observación y selección dentro de su proceso de difusión a través de redes sociales, le permiten a este Proyecto de Grado realizar una lectura colectiva y compleja del espacio inconsciente pero significativo que hay detrás del self.
Por tal razón nace la creación de la “Selfactoria: subversión de la selfie” ubicada en el Design Factory”. Un ejercicio experimental que identifica cómo ésta generación tiene acceso a una cantidad de tecnología y de éste modo encontrar un gran potencial al desarrollo de una Herramienta de Análisis Espacial desde la imagen de la selfie. Esta herramienta, va a proponer un método mixto de análisis, que se va a componer de dos casos de comprobación, el primero se realizará sobre un estudio de imágenes en la ciudad de Bogotá tomadas de Instagram y el segundo a partir de una herramienta física, que se acercará como prototipo de la aplicación.