Description
La afirmación desenfrenada de la “originalidad” de los pueblos indígenas vista como absoluto y opuesta a la sociedad de individuos traduce una nueva forma de violencia. La elección de la teoría étnica de la nación a expensas de la teoría electiva, la preferencia de la identidad cultural por el “plebiscito cotidiano” o por la idea de “asociación secular”, son nuevas formas de violencia. Es la expresión del difícil aprendizaje democrático de las sociedades iberoamericanas, violentas, inseguras y enfermas. Más no enfermas, al grado del horror y el espanto. Ni por asomo México y países iberoamericanos podrían haberse convertido a una metafísica como Alemania o a un mesianismo como Rusia. Nuestras condiciones particulares impedían ver lo Prohibido.