Descripción
Míchel (ruandés nacido en el Congo) recibe al periodista de Vidimus Dominum en el Colegio del Jesús (los jesuitas) en Roma. Para llegar hasta su habitación, hay que subir una montaña de escaleras. Mientras se sube, puede verse a otros muchos jóvenes jesuitas de diversas nacionalidades: unos saludan, otros llevan prisa. Michel sonríe siempre, es tranquilo y seguro. Su habitación habla de él: acogedora, fotografías, recuerdos, colores varios, símbolos religiosos, libros, ordenador, y la música casi nostálgica. Michel se piensa las respuestas, pero responde a todo. A veces se conmueve con algunos recuerdos dolorosos; al hablar con un tono de voz muy sereno nos hace sentir por qué es un joven en camino...