En el contenido de este artículo se reproduce el comunicado del Obispado de Estelí, emitido a raíz del asesinato de los Señores Felipe Barreda y María Eugenia García de Barreda, quienes fueron secuestrados en Diciembre de 1982, mientras realizaban labores de corte de café por el movimiento paramilitar armado que en esa época se conoció como contrarrevolución.