Descripción
Conocer, a través de un estudio profundo y sistemático, el proceso evolutivo, historiografía o si se quiere epistemológico de nuestros medios de comunicación (desde los impresos hasta los audiovisuales y digitales), es un reto que plantea con agudeza, energía y esperanza Guillermo Rothschuh Villanueva en el pórtico de su nuevo libro Puntos sobre las Íes. Se trata de un reto que, bien lo apunta el mismo autor (quien más visiblemente ha tratado de enfrentarlo en las últimas décadas en Nicaragua), requiere de un amplio y multidisciplinario esfuerzo que compete no sólo a la academia y a las ciencias (históricas, sociales y tecnológicas), sino también a periodistas y comunicadores, hacedores diarios de Historia.
En consonancia con la tradición prosística compiladora (pero al mismo tiempo concienzuda y selectiva) de Rubén Darío y otros grandes escritores hispanoamericanos, Puntos sobre las Íes, como casi todos los anteriores libros de Rothschuh, contiene los dechados de los últimos años de su ya larga persistencia como columnista y ensayista en periódicos, semanarios y revistas (a los que ahora se agregan el blog y los medios digitales), derivados de un esfuerzo disciplinado y sistemático por reflexionar, polemizar y discurrir acerca del funcionamiento, retos, disyuntivas profesionales y éticas del periodismo, los medios de comunicación, periodistas y comunicadores de Nicaragua, o más bien de la "aldea global" en que irremediablemente ya se ha convertido cualquier provincia o localidad del planeta, incluyendo por supuesto la nuestra.
El libro contiene interesantes, amenas y a veces hasta encendidas reflexiones acerca de la irremediable y permanente tensión en la relación de los medios de comunicación y los procesos políticos, especialmente el papel decisivo que en los procesos electorales juegan los medios audiovisuales y digitales, en particular el fenómeno de la concentración propagandística y/o publicitaria de la TV, y cómo ésta supone ventajas para unos candidatos o partidos y desventajas para otros actores políticos, así como la inusitada y sorprendente incidencia de las redes sociales de Internet en el ámbito político en tiempos de campaña electoral. Contiene además las permanentemente inconclusas y nunca agotadas reflexiones sobre la libertad de expresión en el ámbito siempre imperfecto de la democracia política, al igual que otros comentarios pertinentes acerca de la amenaza que sobre ésta ejerce la tentación de monopolio sobre los medios, especialmente audio-visuales, a propósito de lo cual se nos brinda una semblanza, también pertinente y eficaz, del magnate televisivo Ángel González.
Puntos sobre otras íes se colocan también, en este libro, respecto a asuntos fundamentales en el funcionamiento cotidiano de los medios como la ética, la censura y auto-censura, la naturaleza básicamente comercial en contrapeso con la responsabilidad social del periodismo y los comunicadores (especialmente la particular imposición de la fiscalización como una de las funciones primordiales del periodismo en la Nicaragua actual, ante la falta de beligerancia y liderazgo de los actores políticos y la nulidad institucional o el secuestro político de las instituciones públicas que deberían ejercer control sobre el poder); los intentos de establecer, o más bien de incorporar a nuestra aún rezagada costumbre mediática la necesaria funcionalidad de un ombudsman o defensor del lector, así como otros puntos importantes que al final resultan insuficientes frente a tantas íes descabezadas que se vislumbran en el panorama actual de Nicaragua y sus medios de comunicación.
Erick Aguirre Aragón