Poner la educación al día, con capacidad de respuesta a las exigencias del desarrollo humano, de las personas y de los pueblos, del crecimiento económico, de la vida ciudadana democrática, de la ciencia, de la tecnología y de la comunicación, es responsabilidad de todos. Lo anterior conduce a convertir la participación en el eje fundamental de la educación global de una nación en sus distintos momentos de formulación de la política educativa y de la gestión de las reformas.
Este ámbito de acción que en teoría abarca a toda la población, no da cabida práctica a todos. La educación rebasa la posibilidad de una participación plena. Sin embargo en relación a los procesos integrales de la gestión educativa, los maestros son actores claves. Ellos son parte insustituible de dichos procesos, lo que debiera traducirse en una participación más directa de ellos en la formación de las políticas educativas y de cuantos elementos las traducen en procesos de enseñanza aprendizaje.
No obstante, muchos maestros en Centroamérica afirman que su participación en el diseño y construcción de la gigantesca obra de la educación es muy reducida. La visión y valoración que expresa el magisterio respecto a la situación de la educación en los distintos países del área, resaltan más las limitaciones, deficiencias y carencias que lo logros, cambios positivos y los esfuerzos realizados para revertir esa situación todavía pendiente de mejoras sustantivas en los sistemas educativos.
Los criterios, opiniones y juicios de valor que integran este libro son palabras textuales en primera persona, de un sector de maestros centroamericanos. Son Palabra de Maestro, sobre la Reforma de la Educación y sobre la Educación de los países centroamericanos.