La introducción de las nuevas tecnologías de información y comunicación (NTIC) en el sector productivo y en la educación ha producido una de las transformaciones más significativas de las últimas décadas, trayendo como consecuencia un cambio en los procesos de producción, distribución y consumo de información y conocimientos, una modificación en la organización de los mercados laborales y los perfiles profesionales y una transformación de las actividades científicas, intelectuales y artísticas.