Descrição
Hace muchos años, en algún momento de mi vida estudié griego y me gustó mucho, inclusive llegué a leer algunos textos en ese idioma, como las Odas de Anacreonte. Para mí era un reto leer una frase escrita en griego y entender lo que significaba, era ni más ni menos un criptograma que había que descifrar. Y cuando comencé a estudiar matemáticas, me interesé por ellas porque las ecuaciones vinieron a ser para mí lo mismo que el griego, a fin de cuentas las matemáticas son también un lenguaje, el lenguaje de la ciencia; tienen su propia gramática: sintaxis, reglas de construcción, y en ese sentido también una ecuación fue para mí un criptograma, una frase escrita en el lenguaje de la ciencia, con un mensaje oculto que había que descifrar.