Nuestra sociedad transita por una serie de reconfiguraciones sociales, entre las cuales destacan las transiciones demográficas y epidemiológicas acentuadas en el aumento de la expectativa de vida y del índice de enfermedades crónico degenerativas y terminales. Éstas inherentemente afectan el estilo de vida y el bienestar y dan lugar a un conjunto de fenómenos en materia de políticas socioeconómicas y de salud, cuyas implicaciones permean lo público y lo privado y que pretenden atender las demandas de la sociedad en este ámbito, sustentadas en prácticas feminizadas y precarias que no toman en cuenta los nuevos modelos familiares, que impactan la capacidad de asumir esta tarea vinculada al rol femenino. Lo anterior se enmarca en escenarios cuyas interacciones y actos de significados están atravesados por una red de emociones en torno al cuerpo enfermo que trastocan y reconfiguran las prácticas y los códigos culturales del cuidado tanto en un nivel micro como en un nivel macrosocial. Surge el cuestionamiento: ¿de qué forma las emociones en los enfermos terminales inciden en la configuración de los códigos culturales del proceso del cuidado? Se propone un abordaje de tipo analítico e interpretativo con una perspectiva construccionista y sociocultural de las emociones y del cuidado. Se realizaron entrevistas, diarios del cuidado y observación participante de dos enfermos terminales y su respectivo cuidador principal, radicados en la zona metropolitana de Guadalajara, cuyo seguimiento inició desde el momento del diagnóstico, por medio de entrevistas, notas y diarios de campo. Para la codificación y análisis se emplearon aspectos de la teoría fundada y análisis del discurso.