Descripción
Las teorías sociales que dan cuenta de la condición de marginalidad o exclusión de ciertos sectores sociales han sido útiles en tanto que evidencian las brutales desigualdades sociales, sin embargo, al subrayar únicamente su condición de vulnerabilidad exacerban la idea de una aparente incapacidad de los sujetos para generar acción social o incluso procesos de transformación, lo que los hace ver como sujetos sumamente sujetados y fatalmente condenados a la reproducción social. Sin embargo, en comunidades como San Juan de Ocotán, los sujetos despliegan diversas tácticas y estrategias simbólicas, en este caso, visibilizadas en la movilización de identidades y la creación de imaginarios colectivos, a través de los cuales logran escamotear o enfrentar los regímenes disciplinares del poder que los niega y los etiqueta como “bárbaros” e “incivilizados”, es decir, como otros, que deben ser educados, civilizados, o modernizados para poder aspirar a ser. El presente trabajo da cuenta de cómo en los intersticios del poder existe la posibilidad de acción y creación por parte de los sujetos, y por tanto también de transformación social. Así, con el presente trabajo pretendo cuestionar la dicotomía que coloca en un
extremo al proyecto político racional y transformador sustentado en un plan de
trabajo organizado para alcanzar el futuro ideal, y en el lado opuesto a la ausencia
de proyecto, la ignorancia, el sometimiento y la mansa sumisión. Con ello busco
preguntarme por la capacidad de creación y transformación social fuera de un
proyecto político, es decir, por lo político que se gesta en el día a día, más allá de la
acción política racional.