Descripción
Debido a la escasez de recursos y a la débil capacidad institucional del sector público peruano, el financiamiento y la prestación de servicios de salud y nutrición depende en gran parte de los gastos de bolsillo. Esto trae consecuencias de precariedad, ineficiencia e inequidad en el sistema, puesto que solo pueden acceder a los servicios en salud quienes pueden afrontar los costos.
La implementación del Seguro Integral de Salud (SIS), como un sistema de aseguramiento público subsidiado, constituye una de las propuestas más importantes para avanzar hacia el aseguramiento universal. Sin embargo, existe un importante segmento de la población no pobre, pero con limitada capacidad adquisitiva, que no está cubierta por ningún sistema de aseguramiento. En un primer intento por atender a la población no pobre y no asegurada, el SIS lanzó, a inicios del año 2006, el programa SiSalud, un seguro semicontributivo que ofrece las prestaciones a través de la red de establecimientos del Minsa y está subsidiado por el Estado.
En este trabajo, se estima la disposición a pagar y la demanda potencial en Lima Metropolitana de los usuarios potenciales no pobres de seguros similares a SiSalud, los cuales están concentrados en los niveles de ingresos medio bajo y bajo. La hipótesis de la investigación es que el Estado podría ofrecer planes de aseguramiento contributivo a personas con estos ingresos, de manera que accedan a cobertura de salud a cambio de una prima que permita cubrir los costos fijos y variables de sus atenciones.