El balance trabajo-familia ha sido ampliamente estudiado por la literatura referida a la gestión humana. La búsqueda de dicho balance está asociada a prácticas de retención del talento.Diversos autores anotan que la existencia de políticas corporativas sobre este tema no resulta suficiente para reducir el conflicto que experimentan los trabajadores por las presiones laborales y familiares. Según afirman, se requerirá de una cultura que acepte y apoye el balance trabajo familia.Esta investigación empírica sugiere que, en el contexto de las empresas peruanas del sector industrial, financiero y de telecomunicaciones en el que trabajan los 96 encuestados, una cultura organizacional que apoya el uso de estas prácticas reduce el conflicto que experimenta el trabajador y, más aún, ambas variables —cultura y conflicto— permiten estimar su voluntad de permanencia en la empresa. No obstante, los resultados obtenidos también sugieren que,si bien el conflicto familia-trabajo (FWC) guarda una relación negativa con la voluntad de permanencia en la empresa, el conflicto trabajo-familia (WFC) no muestra esta misma significancia cuando aparece una cultura que apoya este balance.