A partir de 1950, dos generaciones de economistas del desarrollo han buscado analizar dicho proceso y formular políticas que puedan reducir la pobreza internacional. Hoy, los especialistas del Banco Mundial, con el fin de mostrar el desarrollo de una nación, hacen comparaciones entre países con un instrumento denominado “diamante del desarrollo”, el cual no es más que un gráfico de radar que muestra cuatro componentes básicos: ingreso per cápita (Ipc), tasa de matriculación primaria (Tmp), esperanza de vida (E) y mejoras en el acceso al agua (Ma). Estos componentes fueron seleccionados por su gran importancia para lograr una mejor calidad de vida de las personas.