En su libro, Ventaja competitiva de naciones, Michael Porter sostiene que la ventaja de un país depende de cuatro atributos: los recursos, la demanda, los sectores afines y la estrategia/estructura (rivalidad de la empresa), que luego será más conocido como el “diamante de la competitividad”. Aunque lo considera un sistema autorreforzante, puede darse que la ventaja competitiva puede estar basada en uno o dos determinantes, principalmente, en sectores dependientes de recursos naturales, o bien, que entrañen tecnologías o técnicas poco avanzadas --características que presenta nuestro país en sus diferentes territorios --llámese región, municipio, comarca, o bien, comunidad-- los cuales dependen mucho de los recursos naturales (tierra, bosques, minería) en ellos se destaca el bajo nivel de adopción tecnológica.