Cuando me pidió la dirección de “Encuentro”, una serie de entrevistas pidiendo opinión a mujeres sobre la prostitución, recordé esta entrevista espontánea de una mujer que era parte de ese mundo de media luz de roconolas, malos olores y sobre todo de tristeza.
Por eso he querido presentar este documento personal sobre la prostitución antes de preguntar a otras personas: Señoras y señoritas, amas de casa, estudiantes, periodistas, oficinistas su opinión sobre la prostitución y las prostitutas.
En esta serie de entrevistas hemos querido respetar la frescura del dialogo, y las contestaciones a las preguntas aparecen tal como fueron ofrecidas en forma espontánea.
