El éxito del modelo policial comunitario de Nicaragua ha trascendido las fronteras de nuestro país, pese a los datos de una oleada sostenida de violencia durante los dos últimos años, cuestión que no logra empañar el esfuerzo que muchos hombres y mujeres realizan para que la seguridad ciudadana en el territorio, sea la diferencia con respecto al resto de países de Centroamérica.