Descripción
Desde el punto de vista religioso, el asesinato de Ignacio y sus compañeros fue un martirio. Desde el punto de vista político ha sido la voladura de un puente y la apertura del abismo de la guerra total. Desde el punto de vistas social es una venganza, largo tiempo aplazada de unos cuantos poderosos que nunca pudieron soportar la denuncia moral de estos sacerdotes.
Odio, venganza, extremismo político, impotencia intelectual, violencia salvaje. Todos estos elementos se juntaron en un escuadrón de militares salvadoreños una madrugada de noviembre para poner fin a la razón, generosidad y amor de un grupo de intelectuales jesuitas nacidos en España.