El Prepósito General de la Compañía de Jesús remite, mediante estas reflexiones, el telegrama del Santo Padre, Juan Pablo II, citado a continuación: “Enterado del horrible asesinato en San Salvador de seis padres jesuitas, transmito a Vuestra Paternidad sentimientos de inmensa pena y de viva participación en el dolor de toda la Compañía de Jesús y de los familiares de las víctimas, a la vez que elevo oración al señor en sufragio de sus almas, implorando que este sacrificio no resulte vano sino que sea germen de amor fraterno y de concordia para el martirizado país de El Salvador.”