Descripción
Al píe de la cordillera de Los Maribios, donde colindan los municipios de Quezalguaque y Posoltega encontramos algo muy especial para la zona, y para Nicaragua en general: un bosque artificial. Se trata de la antigua hacienda algodonera Las Colinas, donde hace 18 años inicio una extensa jornada de plantación forestal. Los usos agropecuarios han mermado el valor monetario de importantes partes de las plantaciones forestales, pero han contribuido a crear un ambiente variado, lleno de hábitat para animales y plantas sin muchos otros refugios. Esta combinación de plantación ordenada, y variación creada por los diferentes usos, ofrece muchas oportunidades de estudiar una serie de especies de gran potencial para actividades de reforestación en el Occidente y otras partes del país. Nitlapán ha intentado hacer un pequeño retiro de este gran banco de información, y a través de este texto queremos compartir, en toda su amplitud, nuestras observaciones con el sector forestal. Las Colinas, un sitio fértil pero agotado, se dan a conocer la experiencia de la hacienda, sus problemas, y la necesidad de encontrar un nuevo modelo de manejo, como el cultivo de árboles, así mismo las diversas especies encontradas, y la posibilidad de combinar especies.