La artritis reumatoide es una enfermedad inflamatoria crónica autoinmune que afecta principalmente a las articulaciones. En los últimos años, se ha evaluado el efecto del tratamiento nutricio como coadyuvante del tratamiento médico. Se realizó una revisión sistemática del efecto del tratamiento nutricio sobre artritis reumatoide en adultos. La dieta mediterránea y la dieta libre de gluten disminuyen marcadores bioquímicos de inflamación y mejoran la capacidad funcional y la calidad de vida. Los suplementos alimenticios de vitamina D incrementan los niveles séricos de vitamina D, disminuyendo el dolor y la actividad de la enfermedad. La ingesta dietética y la suplementación de ácidos grasos omega-3 han demostrado disminuir la sintomatología y la actividad de la enfermedad.