Algunas consideraciones fenomenológicas sobre el acto de lectura de poesía desde el concepto de trascendencia según Edmund Husserl
Descripción
La indagación sobre la percepción estética ha sido una tarea filosófica de gran importancia desde los albores del pensamiento y, en occidente, se remonta hasta la filosofía de la antigua Grecia. Sucesivamente, la belleza fue examinada repetidamente por distintos pensadores, y su naturaleza en tanto que belleza fue el problema de mayor interés por resolver. Asimismo, esta inquietud también la compartieron muchos pensadores de principios de siglo XX, quienes en sus investigaciones filosóficas ya demostraban un afán por el conocimiento indudable y preciso y se esforzaban por dar a sus doctrinas un rigor científico. Bajo este signo surgió la fenomenología, cuyo fundador fue Edmund Husserl, y cuyas obras demostraron gran innovación filosófica y un método singular de investigación. La fenomenología fue un método muy útil para la investigación estética y, después de Husserl, tuvo representantes tales como Heidegger, Ingarden y Dufrenne, entre otros. Cada uno de ellos tuvo un modo fenomenológico propio de acercamiento a las cosas y realizó contribuciones importantes en cuanto a la belleza y la percepción de la misma, basados en el método legado por Husserl. En Husserl, empero, no se encuentra el menor indicio de investigación estética, como no fuera una ocasional incursión muy breve o alguna alusión al problema. Husserl jamás produjo una obra dedicada especialmente a la percepción de la obra de arte o a la estética, y a sus discípulos les tocó en suerte investigar la estética desarrollando sus propuestas desde la enseñanza del maestro.Tesis Licenciatura (Letras y Filosofía) URL, Facultad de Humanidades