La consideración e interpretación de las enfermedades mentales —la depresión entre ellas— ha sufrido enormes transformaciones a lo largo de la historia, pero solo el avance sustancial del conocimiento registrado en las últimas décadas ha permitido aplicar tratamientos eficaces. En esta breve exposición se ilustra a grandes rasgos ese proceso histórico, haciendo hincapié en la necesidad de un abordaje integral (biológico y psicológico a un tiempo) de estos padecimientos.