El tratamiento del cierre angular agudo se basa en disminuir la presión intraocular. Esto se logra mediante el bloqueo en la producción de presión intraocular, el aumento en el flujo de humor acuoso o en la disminución del volumen de humor acuoso. La terapia inicial incluye la administración de hipotensores oculares tópicos y orales, así como el uso de agentes hiperosmóticos endovenosos como el manitol3 . En el Hospital Universitario San Ignacio el manitol se usa principalmente para disminuir la presión intraocular en el cierre angular primario. Aunque generalmente se tolera bien, existen complicaciones potenciales a nivel renal, disbalances electrolíticos y de volumen intra y extravascular, sin embargo, rara vez se ha demostrado que su uso empeore las condiciones clínicas preexistente o que ocasione complicaciones posteriores7
Este estudio busca describir las características de los pacientes con cierre angular agudo atendidos en el Hospital Universitario San Ignacio entre 2011 y 2021 que recibieron manejo con manitol para la disminución de la presión intraocular, así como describir las complicaciones asociadas al uso de este medicamento.