La música está a lo largo de nuestras vidas de diferentes maneras. Como vehículo, como música de fondo, como música en primer plano, cómo música que nos hace danzar, llorar, reír, gritar o simplemente nos acompaña mientras estamos donde estemos. Siento que la música estuvo, está y estará también para sanar. Para liberarnos y recogernos, para ayudarnos a limpiarnos y a volver a nosotros mismos, al centro.
Relatos del Tiempo nace de allí, de una búsqueda personal de sanación a través de la música, realizando un proceso de introspección con el propósito de identificar episodios significativos de mi vida, desde mi infancia hasta el momento presente, e interpretarlos como detonantes para la creación. Más que un recital, se propone realizar una experiencia musical a manera de viaje sonoro, donde la disposición de los músicos y del público, así́ como la mise-en-scène, son parte de la construcción de la obra.
Pienso en este proyecto de manera entusiasta y amada, como una forma de recoger estos 28 años de existencia y llevarlos a una composición que evoca emociones y momentos significativos que he vivido a lo largo de estos años. Es un proyecto ambicioso pensado no solo desde el concepto musical si no, desde el arte, la ingeniería, la puesta en escena y la intención de que el público y los músicos tengan una experiencia estética profunda, meditativa y única.