En un mundo globalizado, las empresas trabajan por estar en la cúpula, creando una competencia entre ellas, estas buscan la excelencia y alta productividad. Esto en la actualidad se logra implementando las Tecnologías de la Información, con esto se logra controlar las operaciones y procesos realizados, por lo que la información juega un papel vital en la toma de decisiones. El tratamiento que se realice con la información es fundamental para alcanzar los niveles de productividad y con esto, con la ayuda de Inteligencia Empresarial, conseguir los objetivos planteados.
En las empresas basadas en ventas, la gestión de fuerza de ventas se vuelve un pilar muy importante, teniendo en cuenta la premisa “No se puede gestionar lo que no se mide”.
La elaboración de estrategias ha tomado importancia en las empresas actuales puesto que basado en indicadores realiza una toma de decisiones lo que las vuelve competitivas en relación con el potencial cliente, se debe tomar en cuenta que en la mayoría de los casos un cliente insatisfecho es un cliente que no vuelve. El rendimiento de una empresa se encuentra reflejado por dos factores, por el éxito de las estrategias tomadas y por el nivel de satisfacción de los clientes, esta satisfacción se lo puede conseguir de varias maneras, entre ellas se encuentra un producto superior por la que vale la pena comprarlo, o precio bajo por un producto con calidad.