El mundo real se hizo presente. Un evento local, del que tuvimos conocimiento a través de los medios y las redes sociales, trastocó el mundo. Lo impensable se hizo realidad. Por un momento no hay diferencia entre el mundo real y lo que vemos a través de las pantallas de nuestros teléfonos inteligentes. El tiempo presente pasa del instante, al intervalo, lo cual propicia la reflexión y el cuidado de sí.
Disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=3PuFvcy029g&t=3s