Si la filosofía ha de fundamentar la unidad y la totalidad que dan razón de todo, y Platón está convencido de que debe ser así, no basta con el discurso racional para decir todo lo que la filosofía tiene que decir. Ello hace necesario explorar otro tipo de expresiones, como la poesía, para ver si cumplen con el objetivo de expresar unidad y totalidad o plantearse los límites del lenguaje racional y contemplar la opción del silencio filosófico. El presente artículo explora alguna de las aproximaciones platónicas a la poesía en su búsqueda de un lenguaje que lo exprese todo, desde tres perspectivas distintas, a saber: 1) Platón emplea una forma de escritura que lo emparenta con la tragedia, la poesía y el mito, pero no acepta a los poetas en su Estado ideal; 2) Platón rechaza el carácter irracional e inspirado de la poesía y el mito, pero emplea metáforas y mitos para exponer puntos fundamentales de su filosofía; 3) Platón termina condenando todo lenguaje, oral o escrito, y propone, en la Carta VII, el silencio de la razón.