Bogotá al igual que muchas ciudades colombianas tiene entre sus habitantes al habitante de calle. Este ser usualmente es rechazado por los diferentes grupos poblacionales de la ciudad debido a la manera en que vive y los conflictos que genera como el hurto, la drogadicción y las armas. Este documento pretende entender la manera en que vive el habitante de calle y los espacios y programas que el gobierno le ofrece para su desarrollo, así como buscar alternativas desde la arquitectura que pueden proporcionarle una mejor calidad de vida