Descripción
Jerónimo, como personaje histórico, vivió muy próximo al período final del Imperio Romano de Occidente y, por tanto, fue testigo de diversos hechos que acaecieron durante la segunda mitad del siglo IV y la primera parte del siglo V: incursiones bárbaras, enfrentamientos con los persas, intolerancia al cristianismo, restauración del paganismo y proliferación de sectas cristianas o radicalización de la división del Imperio. La producción literaria de Jerónimo sintetiza su vida como hombre, cristiano, sacerdote, asceta, político, intelectual, historiador y peregrino de tierras imperiales. Sus obras reflejan un contexto histórico concreto que nos brinda pistas para comprender la época en cuestión.
A partir de las obras de san Jerónimo, especialmente de su Epistolario, se identificarán las estructuras propias de las ciudades romanas de época Bajo Imperial, se describirá a Roma y a Jerusalén como ciudades modelo que posibilitan comprender el tránsito de ciudad romano imperial a ciudad cristiana.