Un tumor fibroso solitario (TFS) es una neoplasia mesenquimatosa de células fusiformes, descrita inicialmente en la pleura. La Organización Mundial de la Salud (OMS) clasifica al tumor fibroso solitario como una neoplasia con potencial biológico intermedio. Las imágenes diagnósticas son fundamentales para el abordaje diagnóstico y terapéutico en esta entidad. El tratamiento estándar para este tipo de lesiones es la resección quirúrgica con márgenes oncológicos mayores de 1 cm. Los tumores fibrosos solitarios localizados en las regiones perianal, perineal y pélvica son poco frecuentes y representan un desafío en el abordaje clínico, principalmente porque las manifestaciones son inespecíficas. Dada la baja incidencia de este tipo de neoplasias, presentamos dos casos de TFS en la región perianal manejados en un hospital de alta complejidad.