El proceso acelerado de secularización acompaña una pérdida existencial de interés por la pertenencia a la Iglesia y surge la pregunta por su sentido y valor como comunidad de salvación en el mundo actual. Al respecto, la propuesta metódica de Bernard Lonergan es pertinente para la articulación antropológica y teológica de este problema, al integrar la mutua relación entre religión y cultura. En éste artículo, a través de la identificación de fuentes y categorías antropológicoteológicas, la autora va mostrando el camino para una apropiación del sentido y valor redentor de la Iglesia en el mundo.