Ya en el Nuevo Testamento, Pedro y Pablo se plantean la pregunta por la salvación de los no judíos. El estudio de la vida de los Apóstoles y de su confesión de fe sobre la universalidad del proyecto salvífico de Dios, que debe realizarse en el acontecer histórico, con sus vicisitudes e incertidumbres, ofrecen elementos válidos para una lectura del documento vaticano Dominus Iesus.