Las redes sociales no solo cambiaron la manera en que nos comunicamos sino también en la forma de hacer activismo. Cada vez es más común que los activistas empleen las redes para organizarse, realizar denuncias y convocatorias e informar a la opinión pública su mensaje. Asimismo, las redes sociales generan narrativas que ayudan a los movimientos sociales a fortalecer su identidad colectiva. El fenómeno de las redes sociales y el activismo está relacionado con la comunicación política, debido a que éstas les dan la oportunidad a las comunidades de tener un espacio en el debate de lo público, el cual históricamente le ha pertenecido a los medios de comunicación hegemónicos y a los políticos.
Desde el 2011 las redes sociales empezaron a ser relevantes en el movimiento estudiantil colombiano. Más adelante, en el paro estudiantil del 2018, los estudiantes se apoyaron en las redes sociales para crear y reforzar sus narrativas. En este estudio se analiza como a partir de los distintos formatos disponibles en las redes sociales, Instagram y Twitter, se construyeron narrativas digitales en torno a la manifestación del 10 de octubre de 2018 y sus dos días anteriores. Igualmente, se estudian la relación entre comunicación política, redes sociales y movimiento estudiantil colombiano.