Descripción
Este libro se traza un desafío interdisciplinar: poner en comunión las artes y las ciencias sociales en torno al campo de la danza, aunque con clara distancia frente a los folclorismos. El pretexto es, esta vez, el bullerengue, que se define como un baile cantado tradicional de origen afro practicado en la costa Atlántica colombiana desde la Colonia. Bullerengue significa jolgorio, bulla; una bullaranga que es canto, tambor y baile: canto responsorial y toque de tambor contrapunteando en la improvisación; palmas e instrumentos disputándose la maestría; rueda de los cuerpos danzantes que uno a uno —pero siempre en pareja— rivalizan por el glorioso centro de expresión y de mirada.
Dicho vaivén de sentires ofrece una oportunidad única para la investigación social, en cuanto es, al mismo tiempo, práctica viva de los pueblos, práctica escénica de los folclorismos danzarios y práctica conformadora de sujetos. Este es, pues, el centro de reflexión en esta obra. Con este objetivo y a través de una sugestiva estrategia teóricometodológica el libro indaga por los intercambios sensibles y las subjetividades generados en el bullerengue, cuya práctica se ejerce, se tensiona y se debate entre el peinao (arriba de tarima, la puesta en escena) y el despeluque (abajo de tarima, en la vida cotidiana y ritual).