El núcleo del problema entre Heidegger y Lévinas está en el concepto de metafísica. ¿Qué es lo que realmente significa la trascendencia del hombre? ¿Será la temporalidad del Dasein que lo lleva a ser pastor del ser, o es, por lo contrario, la substitución de la subjetividad en cuanto ser-por-el-otro? En otras palabras, ¿será la metafísica una ontología o una ética? En esta investigación no se desea indagar si en la filosofía de Martín Heidegger hay o no hay una ética, pues comparte con Gadamer la afirmación de que esta cuestión es un desiderátum y un extremo atrevimiento en la medida en que Heidegger rechazó en diferentes situaciones este problema. Esta investigación tampoco tiene como objetivo presentar a Lévinas como superación de la ontología heideggeriana. Por lo contrario, esta investigación tiene como intención explorar en forma de diálogo las críticas realizadas por parte de Lévinas al pensamiento de Heidegger de la década del veinte (en especial Ser y tiempo), para mostrar a partir de allí tanto sus vacíos en relación con la vulnerabilidad y hospitalidad con el otro, como también sus posibles respuestas a varias de sus críticas, pues consideramos que Heidegger propone un pensamiento fundamental sobre el Dasein que necesita ser considerado de nuevo porque ha sido tergiversado o se ha asumido de manera parcial e incompleta.