En la década de los 90, la implementación de una serie de políticas neoliberales suscitó una movilización indígena que trajo consigo transformaciones políticas y sociales dentro del Estado boliviano. Dichas transformaciones encontraron diversos espacios de aplicabilidad y fueron articuladas con la llegada de Evo Morales a la presidencia. El presente trabajo de investigación analiza tanto el papel que ha desempeñado el indigenismo como transformador de la estructura del Estado boliviano, como la trayectoria que ha tenido esta ideología como un marco cognitivo de los movimientos indígenas que se han movilizado antes y durante el gobierno Evo Morales. Lo anterior se realiza desde diferentes aportes teóricos, que admitirán estudiar la experiencia del indigenismo como una alternativa frente a las instituciones tradicionales del Estado, siendo ejemplos de esto la organización territorial, la política exterior y el ejercicio de la democracia.