El consumo de tabaco es considerado como uno de los principales factores que contribuyen al aumento de la morbilidad - mortalidad en los seres humanos, por lo que la Organización Mundial de la Salud, señala que el consumo de tabaco es perjudicial para la salud de los consumidores, y de aquellas personas que están a su alrededor. Se estima que en el año 2000 alrededor de 4 millones de personas en todo el mundo murieron a causa de enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco y en el año 2030 esta cifra se elevará a 10 millones de personas que mueren anuales.