El concepto de "lo rural" se ha modificado
significativamente. Han existido transformaciones
ambientales, sociales, económicas en la vida y
el medio rural, que demandan un concepto más
complejo e integral de lo rural, que ya no se
reduce a las lógicas de la producción
agropecuaria y al desarrollo de la actividad
campesina, sino que articula múltiples aspectos
relacionados con las dinámicas de conservación
y protección ambiental, la producción
sustentable, el desarrollo socioeconómico
integral, el mejoramiento de la calidad de vida
de la población, la ocupación y utilización
del espacio, la organización y gestión
empresarial y social, las relaciones
interinstitucionales, la participación,
democratización y convivencia, entre otros
aspectos, que llenan el concepto de una
percepción más holística e integral. Desde
esta reflexión, la visión de desarrollo rural
no puede estar enmarcada únicamente en lo
agrario.