A partir de un estudio de caso del conflicto armado en la región del Sur de Bolívar - Colombia, el autor plantea como las identidades políticas de los pobladores en medio del conflicto antes que ser un apriori sociológico responden a una dinámica racional sujeta a las lógicas de la violencia implementadas por
los actores armados. Así, teniendo como punto de partida la identidad contestataria que han sostenido históricamente los pobladores de dicha región, examina como pudieron incidir las dinámicas armadas que implemento el paramilitarismo a partir de 1997 para que emergiera en medio de la población el movimiento "No al despeje" que se opuso del 2000 al 2002 al establecimiento de la mesa de diálogo entre el gobierno y el ELN.