El presente artículo es un análisis de la fotografía presentada por el grupo guerrillero ELN como prueba de supervivencia de dos de los siete extranjeros secuestrados en las montañas de la Sierra Nevada de Santa Marta en Colombia, en septiembre 12 de 2003. En esta imagen, la Señorita Alemana Reinhilt Weigel, sonríe y carga un rifle de asalto AK–47 convirtiéndose en una imagen que el autor clasifica como transitoria y subversiva; no sólo por su contenido sino por la disrupción que presenta en lo que es entendido por ciertos contextos como lo femenino. La discusión que el autor desarrolla es el entrecruzamiento de estudios visuales y cuestiones de género, mostrando las diferentes conexiones que existen entre cuerpo e imagen en el contexto Colombiano donde diferentes formas institucionales hacen uso de lo femenino como significante. En el artículo, se parte del supuesto de que la imagen no es una mera aparición o representación sino que esta se enmarca dentro del sentido de la performancia e identidad. Este artículo busca ahondar en la imagen–cuerpo y sus usos para así establecer una explicación de su caracterización, a través de la imagen de la Srta. Weigel, que vaya más allá de lo aparentemente impropio de la esta.