A pesar de la contribución de la actividad física a la salud y a la prevención de enfermedades, la frecuencia de inactividad física ha aumentado progresivamente. Una de las estrategias propuestas para promoverla se basa en la asesoría que los médicos pueden brindar a sus pacientes. Sin embargo, múltiples situaciones del proceso de formación médica no lo favorecen. Incorporar la enseñanza de la actividad física puede contribuir a la promoción y prescripción de esta actividad por parte de los futuros médicos.