Las percepciones (experiencias sensoriales) más intensas, impactan fuertemente a la memoria. Sin embargo, cuando penetran reiterativamente en el entorno abstracto de la mente sin que logren resolverse de forma racional, se vuelven un conflicto obsesivo que seguirá recreándose en los sueños, en el inconsciente y en los estados de vigilia, logrando invadir hasta lo más íntimo de nuestro ser. Esto es Sueña Conmigo, la creación de un mundo, cuyas instrucciones genéticas conforman un universo fugaz, del cual no quedará rastro alguno de su existencia. Su irreparable destino, es la nada misma, ya que a su vez, no habrá nadie quien lo olvide, lo recuerde o lo sueñe. Simplemente dejará de existir.