Este ensayo ubica, dentro de la problemática de la imagen como memoria colectiva de un mundo en permanente transformación, la necesidad de medios cada vez más rápidos y directos que respondan a la necesidades de la modernidad, dada la continua aceleración de sus procesos de transformación. De esta misma modernidad surgen estos medios que, como la fotografía, el cine y demás sucedáneos, permiten veloces registros de esta. Expongo aquí el caso concreto del cine latinoamericano y colombiano, como testimonio de un patrimonio en continuo deterioro, el de las ciudades latinoamericanas con su violento y rápido crecimiento. Muchas de estas películas se han dedicado a retratar estas ciudades en movimiento y transformación.